El fuego comenzó a arder desde muy temprano. En los hornos de barro que custodiaban la escuela, en la cocina, en cada productxr que iba llegando, en los campesinos y las campesinas guardianas de semillas que fueron armando esta hoguera/hogar que crece con el paso del tiempo y que arde en nosotrxs como motor para seguir andando. Mucho trabajo, mucho. Un enorme trabajo colectivo fue la clave para que sucediera. Docentes, estudiantes, organizaciones, amigxs, compañerxs, más de cien puestos de productos campesinos, de la economía social, solidaria y popular al alcance de toda la comunidad que se acercó a vivir una fiesta única; abrazados al calor del médano y de la común-unión de la identidad, la memoria viva de los pueblos y la convicción cada vez más arraigada de que un mundo mejor es posible. Y no es solo un decir, es un hacer-ser en las comunidades campesinas. Lo vimos y lo vivimos en ese oasis de creencias, lucha y esperanza que ansiamos se propague en cada rincón del universo como una religión que nos permita ese buen vivir que pregonamos en cada acción. Sabemos que estos tiempos son difíciles y la incertidumbre inquieta nuestros corazones pero no vamos a permitir que nos roben la alegría del encuentro, el sentido de comunidad en el que creemos y que seguimos alimentando.
El sábado 7 de septiembre se llevó a cabo la 22° edición de la Feria Provincial de Semillas Nativas y Criollas. El encuentro tuvo lugar en la Escuela Secundaria N° 68 de Medanitos, Tinogasta.
Organizado por la Asociación Campesinos del Abaucán (ACAMPA) y Bienaventurados los Pobres (Be.Pe.), como desde hace 22 años se preparó un encuentro entre feriantes y productores agroecológicos/as de la región y de diferentes provincias del país que estuvo abierto desde las 8 hasta las 18 hs.
Así como en cada oportunidad, los/as diferentes feriantes llevaron sus productos: alimentos, plantas, artesanías, semillas, etc. para ofrecer a lo largo de todo el día.
En el evento se realizó, durante las primeras horas de la mañana, el tradicional trueque que tiene por objetivo principal conservar y multiplicar las semillas. Una vez finalizado este intercambio, se dio inicio a las ventas.
Este encuentro tuvo la mística y la magia del trabajo colectivo creyendo, apostando y confiando en un sueño como la semilla que germina cada año y que sostiene el fuego vivo de la memoria de las comunidades campesinas.
Como decía la Dorila: “¡Hay que luchar! ¡El agua es todo!”
Adhesión a la Ley Nacional N° 27.742 – Régimen de Incentivo para grandes inversiones RIGI
Desde fines de la década del 70 del siglo XX, las grandes empresas transnacionales en general y en especial las dedicadas a la industria extractiva vienen siendo beneficiadas por diversas leyes, que se construyeron a su medida. Es el caso de la Ley de Inversiones Mineras (ley 24.196).
Si bien se trata de leyes que flexibilizan y dan beneficios exorbitantes a las empresas transnacionales, el recientemente aprobado Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones (RIGI) supera ampliamente lo que se viene legislando hasta el momento. Se trata de una propuesta obscena, descarada y claramente creada respondiendo a los intereses de corporaciones internacionales mineras e hidrocarburíferas.
Son tales los beneficios otorgados por el RIGI a las megaempresas extranjeras que podemos decir que implica: la entrega de la autonomía de los mal llamados recursos naturales de las provincias; un pase libre para que las empresas sigan beneficiándose a costa del uso exorbitante de agua, de la contaminación ambiente y de la destrucción de ecosistemas y modos de vida; y la renuncia del ejercicio de control sobre las empresas por parte de distintas instancias del estado.
Requisitos del RIGI, más para el estado que para las empresas
Sería lógico pensar que este régimen establece claros requisitos para que las grandes inversiones sean incluidas en sus beneficios. Sin embargo, no es así. Más que requisitos para las empresas, el RIGI establece una serie de obligaciones del estado para facilitar y otorgar esos beneficios.
Desenmascaremos algunos de los mecanismos que favorecen indiscutiblemente a las grandes inversiones. El artículo 14 establece que: “la Autoridad de Aplicación contará con un plazo máximo de 45 días corridos para expedirse aprobándolos o rechazándolos”. Se refiere a la solicitud de adhesión al régimen y al plan de inversión que se tienen en cuenta en el procedimiento de evaluación. Claramente el período de tiempo establecido es demasiado corto para hacer posible una evaluación detallada del proyecto.
Además, las evaluaciones y requisitos planteados en los primeros capítulos del RIGI no establecen ningún tipo de control o evaluación sobre el impacto ambiental del proyecto ni controles sobre las condiciones de contratación de lxs futurxs trabajadorxs, como tampoco la obligación de contratación de mano de obra local.
Es interesante analizar en qué casos las empresas quedan excluidas del acceso al régimen. Que hayan tenido sanciones ambientales, sentencias por violaciones de derechos humanos, violaciones de derechos laborales, no son motivos para quedar fuera del régimen. Sólo lo son que las empresas hayan tenido sentencias penales (ley de responsabilidad penal, 27401), se hayan declarado en quiebra previamente o tengan alguna sentencia por denuncia de la AFIP (Administración Federal de Ingresos Públicos).
Beneficios con lupa
Partimos de que se trata de beneficios obscenos e injustos.
Por un lado, implica una clara apuesta a la extranjerización y la primarización de la economía argentina. Y esa apuesta representa una injusticia en dos sentidos: en el pago de impuestos por parte de las empresas; y en la apertura privilegiada del ingreso de insumos del extranjero, en cuyas cadenas de valor estas grandes empresas suelen tener participación.
Por otro lado, se les permite a las empresas exportar el 100 por ciento de lo que extraen, sin obligarlas a dar valor agregado al “recurso” en la Argentina y obviando las necesidades de ese “recurso” a nivel local.
Entre los beneficios podemos destacar:
Impuesto a las ganancias: alícuota reducida del 25%. Régimen especial de amortización acelerada que le permitirá a las empresas evadir “legalmente” el impuesto de manera escalonada, mediante diversos conceptos: impuesto sobre los débitos y créditos de sus cuentas bancarias, pérdidas o intereses por diferencias de cambio.
Impuesto al valor agregado: facilidades de cancelar el IVA (incluidas las percepciones) a partir de la facturación de proveedores o a la AFIP a través de la entrega de Certificados de Crédito Fiscal, sobre los cuales tienen libre disponibilidad.
Exención de derechos de importación: las empresas incluidas en el RIGI podrán importar libremente todo tipo de bienes de capital e insumos, ya sean nuevos o usados, prácticamente sin control (imposible de ejercer en los plazos establecidos) y sin pagar ningún tipo de tasa.
Exención de derechos de exportación: las empresas adheridas al RIGI podrán exportar libremente sin pagar ningún tributo, luego de transcurridos 3 años contados desde la fecha de adhesión. Cabe destacar que las operaciones extractivas por lo general inician el proceso de exportación luego de entre 2 a 4 años de construcción de la infraestructura; es decir, nunca pagarán derechos de exportación.
Estabilidad fiscal y derechos adquiridos. Todos estos beneficios que otorga el RIGI se encuentran blindados por 30 años, periodo en el cual no se les puede cobrar a las empresas un porcentaje mayor de un impuesto ni ningún tipo de impuesto nuevo. Sólo deberán hacer frente a la alícuota del IVA y los aportes y contribuciones de la seguridad social. Así, la estabilidad fiscal impide cualquier tipo de limitación o cercenamiento -directo o indirecto- de los beneficios otorgados por el RIGI.
Resolución externa de conflictos
Otro de los puntos gravísimos que contiene este Régimen es el tema del arbitraje y la resolución de conflictos legales que pudieran tener las empresas adheridas, ya sea con particulares o algunos de los estamentos del Estado. Esos conflictos serán resueltos bajo los términos de la Cámara de Comercio Internacional y el CIADI (Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a las Inversiones). Este centro, con sede en Washington, fue creado por el Banco Mundial con el objeto de blindar las inversiones de las potencias mundiales. Claramente, en los conflictos que pudieran suscitarse entre empresas y estados, el CIADI acumula una larga historia de arreglos favorables a empresas contra los estados.
Provincias sin autonomía
En su último capítulo, el RIGI establece prácticamente la pérdida total de la autonomía de las provincias. Aquellas que adhieran a este Régimen tienen prohibido incorporar algún tipo de canon o impuesto distinto a los establecidos en esta ley. Además, la propia ley posibilita que las empresas soliciten al Estado Nacional la suspensión preventiva de fondos coparticipables por un monto equivalente a algún “impuesto indebido” que se les haya cobrado, hasta tanto se resuelva la situación.
Letra muerta
Todos los enunciados incorporados en el RIGI que se refieren a un futuro prometedor son letra muerta, es decir son sólo discurso. Los pueblos saben que las grandes inversiones a las que el régimen considera “de interés nacional, conducentes a la prosperidad del país y promotoras del desarrollo económico, de la competitividad, del aumento de las exportaciones y de la creación de empleo”, no generan eso. Siglos de extractivismo demuestran lo contrario: beneficios extremos para empresas, destrucción de medios de vida y pobreza para las comunidades; y en el medio, las distintas instancias estatales que sólo se preocupan por tejer cada vez más estrechamente alianzas estratégicas con el capital.
El 21 de abril se realizó en la ciudad de Buenos Aires la audiencia final del Juicio Ético y Popular a los Ecocidas, en la que se presentó y se nutrió colectivamente la sentencia final de ese proceso.
Esta propuesta pedagógica de los movimientos populares del Abya Yala, impulsada por el Equipo de Educación Popular Pañuelos en Rebeldía, se llevó a cabo como respuesta a la imposición, en las últimas décadas, de modelos extractivistas que implican usos corporativos de los territorios y predominio de actores económicos, políticos y sociales que actúan como eslabones de las cadenas del neocolonialismo. La propuesta tuvo como objetivo sostener un proceso de justicia popular ante la expropiación de la justicia “formal” por el orden neocolonial; fue un acto contra-colonial hacia la emancipación.
Algunos de los objetivos de este proceso de justicia popular fueron: 1. Identificar a los principales responsables de la destrucción de la naturaleza, los bienes comunes, los pueblos del Abya Yala, en sus distintas expresiones y responsabilidades: empresas, gobiernos, Iglesias, medios de comunicación de masas, universidades, fundaciones, países financiadores, etc. 2. Identificar los impactos de esta destrucción sobre la naturaleza, y sus alcances para otras generaciones. 3. Identificar los impactos de esta destrucción para las comunidades y pueblos y establecer los vínculos entre las políticas ecocidas, genocidas, etnocidas, claramente violatorias de los derechos de los pueblos. 4. Identificar los impactos de esta destrucción para las mujeres, lesbianas, trans, travestis, identidades diversas disidentes del heteropatriarcado. 5. Identificar los procesos de criminalización de quienes resisten la destrucción de las políticas extractivistas. 6. Valorar los procesos de resistencia y rebeldía frente a estos procesos de violencia colonial, capitalista, patriarcal, y la constitución de sujetos organizados que los promueven, y de alianzas posibles entre los mismos. 7. Hacer ejercicios de memoria colectiva de las resistencias populares y de los aprendizajes que nos dejaron quienes abrieron camino en esta dirección. 8. Construir una sentencia desde los pueblos, que condene a estos crímenes de lesa humanidad y de lesa naturaleza. 9. Producir materiales teóricos, pedagógicos y comunicativos que permitan socializar los saberes colectivos creados a partir de las luchas, y en las audiencias.
Luego de dos años de iniciada esta experiencia política y pedagógica con 22 audiencias realizadas en distintos territorios, junto a pueblos y comunidades originarias, asambleas y organizaciones socioambientales de Argentina, Chile, Brasil, Uruguay, Paraguay, Bolivia, Honduras y Guatemala, en esta audiencia final se presentó y enriqueció una sentencia que culminó este proceso de denuncias populares. El Tribunal de la Justicia Popular expresó en dicho documento que funcionarios, miembros de universidades nacionales, dueños de medios de comunicación, algunas ong´s, son responsables de actos de ecocidio, genocidio y epistemicidio, por su colaboración y promoción de proyectos extractivistas.
Un integrante del Tribunal expresó en esta audiencia final una frase que refleja las proyecciones de experiencias que, como ésta, denuncian los extractivismos como formas de atentar contra la autodeterminación de los pueblos: “Que regresen los pueblos a los territorios y los territorios a los pueblos”, Marcos Pastrana.
“Bailan y cantan sus hijos, en esta jornada inacabable, y van convidando a la tierra un bocado de cada uno de los manjares de maíz y un sorbito de cada uno de los tragos fuertes que les mojan la alegría.”
Eduardo Galeano
En el marco de La Semana Continental de las Semillas Nativas y Criollas 2024, de la cual participaron integrantes de nuestra asociación Laura Fernández, Sebastian Pinetta y Lisandro Gallado, compartimos la experiencia de la Asamblea Regional de Maela Cono Sur.
Con la esperanza a flor de piel, la convocatoria tuvo lugar en la ciudad de El Dorado-Misiones la semana del 24 al 27 de julio con la participación de miembrxs del Movimiento Agroecológico de Latinoamérica de diferentes países tales como: Paraguay, Uruguay, Chile, Brasil y Argentina para lleva a cabo dicha asamblea.
En esta oportunidad, el eje central de trabajo tuvo base sólida en el planteamiento de aportes y miradas estratégicas sobre líneas de acción del Maela Continental. También fueron propicios espacios de talleres que buscaban impulsar la reflexión y análisis de nuestras realidades, de transformación personal y colectiva abordados desde el taller de Mujeres y Agroecología así como también, desde el taller de Masculinidades y Agroecología.
El día 26 de julio se realizó el lanzamiento de la Semana a nivel Continental de manera virtual. Es necesario destacar que dicho evento viene produciéndose desde el año 2015.
En un contexto social, político y económico que se torna cada vez más complejo estos procesos se constituyen como una luz en la oscuridad y abren camino al disfrute en comunidad de la diversidad, del intercambio de semillas y saberes, plantas, frutos, productos, sentires y, por supuesto ante todo; al reencuentro.
Finalmente, esta gran fiesta culminó con la Feria Provincial de Semillas de Misiones que se desarrolló en la ciudad de Wanda, departamento Iguazú el sábado por la mañana recibiendo la bendición de la hermana lluvia para dar y forjar la vida en abundancia.
Sentires y experiencias unidos en un ritual que enciende la chispa de la esperanza y alientan el caminar colectivo, entramando sueños y trabajo territorial para dar inicio a lo que vendrá junto a lxs compañerxs de Acampa en la próxima Feria de Intercambio de SemillasNativas y Criollas, el 7 de septiembre del corriente año en Medanitos-Catamarca.
Del 12 al 21 de julio se vivió una nueva edición en Catamarca de la Fiesta Nacional e Internacional del Poncho y la Red Achalay una vez más participó de ella.
En este contexto socio-económico y político que estamos atravesando fue un logro para la provincia poder realizarla.
Los marcos colaborativos que existían a nivel nacional y provincial no pudieron sostenerse como otros años y eso produjo que el esfuerzo de lxs productorxs sea mayor para su participación.
Achalay es una red de cien productorxs con sus familias que trabajan en la producción permanentemente.
También hay compañeros y compañeras de varias provincia del país como Buenos Aires, Entre Ríos, San Juan, Mendoza, Tucumán y Río Negro.
Los rubros que se podían encontrar en los 63 stands fueron muy diversos: los tradicionales como pastelería, repostería, panificación; artesanías en madera, cuero, arcilla, tejidos y de nuevas tecnologías y sus combinaciones como joyería, origami, vitrificado, etc.
Cómo se trabaja para llegar a la Fiesta del Poncho
En marzo comienza la organización para participar en la fiesta más grande de la provincia a través de asambleas que se realizan en la sede de Be.Pe., se planifica, se genera un presupuesto, se arma plan de comunicación, catálogo de productos, se definen ideas y metas y, finalmente, se vive la experiencia de la Certificación Participativa para presentar y definir los productos para el gran momento. Estos encuentros son sumamente necesarios para fortalecer el trabajo en equipo.
Todos los años se avanza un pasito más y éste se pudieron concretar trabajos de reparaciones, jardinería, decoraciones y la cartelería que nos identifica.
Y un nuevo ciclo adquiere la gran importancia de potenciar la comercialización con el patio matero marcando una dinámica de gestión cultural y con una propuesta con precios accesibles y ofertas para todo el público.
Contexto diferente con nuevas dificultades
Este año se suma el frío pero siempre tiene que salir el sol.
La red crece en su autonomía y nosotrxs como Be.Pe. acompañamos en su camino desde la logística, la organización, la planificación y siempre poniendo el cuerpo y el corazón para que siga creciendo desde la comercialización por una Economía Social, Solidaria y Popular.
Del 26 al 28 de abril se realizó en Gualeguaychú el 37° Encuentro de la Unión de de Comunidades (UAC) que reúne asambleas, colectivos y personas por la vida y el territorio Asambleas, contra el saqueo y la contaminación. En esta oportunidad el Encuentro se dio bajo la consigna “sin agua no hay vida”.
Con la presencia de miembros de asambleas de Uruguay, Buenos Aires, Mendoza, Gualeguaychú, Concepción del Uruguay, San José, Misiones, Santa Fe y Catamarca, así como vecinas y vecinos de distintas comunidades, se trabajó en comisiones para debatir cómo los gobiernos de ultraderecha afectan a nuestros cuerpos y a nuestras comunidades.
Al finalizar la UAC, las asambleas y colectivos, participaron en la Marcha al Puente para pedir, una vez más, por el desmantelamiento de la planta de UPM, resaltando la importancia histórica de las actividades en el lugar y a pesar de las prohibiciones actuales.
En esta oportunidad asambleas, colectivos y comunidades de diferentes territorios que no estuvieron presentes en cuerpo sí lo hicieron enviando adhesión y saludos, y fue destaca la importancia de sus voces durante el encuentro.
Se presentaron propuestas y se generaron debates en varias comisiones, abordando temas como la resistencia al sistema capitalista, la construcción de comunidad territorializada y el debate entre sociedad y comunidad.
Se aprobaron diversas iniciativas, como la creación de un micro de radio de la UAC, el fomento territorial de la agroecología como camino para la transición de modelo productivo y el impulso del decrecimiento y la permacultura para mitigar la crisis climática. Se estableció una agenda de acciones futuras, incluyendo encuentros interchacras, acciones de apoyo a causas como la del pueblo palestino, y la difusión de guías de cuidados médicos y comunitarios.
Finalmente, se reafirmó la importancia de fortalecer la UAC como una herramienta fundamental para generar un cambio, haciendo hincapié en la participación activa de las organizaciones territoriales.
[1] Texto elaborado por la Comisión de Prensa de la UAC.
Los días 19 y 20 de abril participamos en el Encuentro Internacional “Radicalizar la democracia. Estrategias feministas frente a las nuevas derechas”, organizado por la Fundación Rosa Luxemburgo en la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires[1].
En la convocatoria del encuentro se expresaba que “la Nueva Derecha parece estar empujando a las fuerzas progresistas y de izquierdas a la defensiva en casi todo el mundo. Al venderse con éxito en muchos lugares como agente de cambio, está asignando a los movimientos populares el papel de luchar por la mera preservación de unos derechos conquistados hace tiempo. Ante este escenario, sólo el potencial transformador y emancipador de los feminismos se revela como la fuerza necesaria para cambiarlo todo”. La propuesta del evento, teniendo en cuenta ese contexto, fue debatir, intercambiar experiencias y construir acuerdos por parte de los feminismos sin fronteras que forman parte de decenas de organizaciones sociales y políticas que participaron. A estas propuestas se sumaron algunas preguntas que orientaron los debates: ¿Cuáles son los ejes que nos permiten leer el contexto actual? ¿Cuáles son los límites y las potencialidades de los feminismos al momento de unir fuerzas? ¿Es posible construir alternativas a partir de las experiencias exitosas compartidas? ¿Cómo hacemos visibles nuestras demandas y que no es posible proyectar el futuro común sin nosotras?
Foto: Fundación Rosa de Luxemburgo Cono Sur
Además de paneles con feministas de distintos territorios, se realizaron talleres referidos a los siguientes temas: derechos sociales y reproductivos y precarización de la vida en la estrategia de las nuevas derechas; violencia política y represión; nueva derecha ¿a quién nos enfrentamos?; la agenda de los progresismos; el impacto de las alianzas de las derechas en el Sur Global; ¿La rebeldía se volvió de derecha?; entre lo rural y lo urbano, soberanía alimentaria; entre calle e instituciones; entre lo local y lo transnacional; entre lo urgente y el autocuidado; feminismo sindical; educación popular feminista; prácticas exitosas; ¿Qué organizaciones necesitamos?; estrategias de comunicación digital; derecho a la vivienda y la ciudad; la vida en el centro: cuidados; trabajo comunitario; economía popular, feminista, campesina; violencia de género; ecofeminismo y transiciones eco-sociales. Enfrentar a las Nuevas Derechas requiere que pensemos y luchemos juntas. Con esta premisa, y tal como lo plantearon las organizadoras del encuentro, son necesarios tres elementos en nuestras estrategias: un análisis y una crítica del presente, una visión clara de un futuro mejor y propuestas concretas de nuestras luchas y nuestras prácticas para pasar de uno a otro.
Entre los días 20 y 28 de noviembre estuvimos recorriendo territorios-pueblos catamarqueños arrasados y amenazados por la gran minería: el Salar del Hombre Muerto, en Antofagasta de la Sierra; Andalgalá, viviendo la tortura del pretendido desarrollo de Mara (la explotación de la mina Agua Rica), y Fiambalá, resistiendo al atropello de la empresa Zijin-Liex con la infaltable complicidad de las autoridades de gobierno en todos sus poderes y niveles.
Al recorrido lo hicimos Pato y Rosi, de Be. Pe., con Alessandro Cinque, fotoperiodista italiano, con experiencia de residencia y convivencia en Perú, entre comunidades indígenas afectadas por la mega minería. Y justamente, el objetivo principal del viaje fue tomar contacto con las personas que habitan estos territorios, se sienten arraigadas en ellos, y, por lo tanto, los defienden con todo lo que tienen: sus propias vidas.
El paisaje, la fuerza cósmica emanando de la tierra, la presencia inteligente de las criaturas rocas, vegetales, animales… se hicieron oídos y registros de las conversas compartidas. Aprendimos que el ojo avezado de Alessandro sabe conjugar paisajes y rostros; cuerpos y huellas; luces y sombras; historias y geografías habitadas. Con sus fotos logra retratar la impudicia del extractivismo minero, motor fundamental del sistema hegemónico capitalista – colonial – patriarcal. En su obra “Perú, un estado tóxico”, adelanta una síntesis de su trabajo de investigación y registro testimonial de voces y de rostros; entre sus páginas reveladoras del drama de más de cinco siglos, podemos leer:
En la actualidad, los Andes siguen albergando algunas de las comunidades indígenas y quechuhablantes más pobres del país, cuya riqueza fue saqueada por los españoles y ahora es explotada por empresas multinacionales. Respaldadas por las políticas de laissez-faire de un Estado neoliberal, las grandes compañías han recorrido los Andes en busca de metales. El precio a pagar ha sido la salud de los indígenas peruanos, cuyas fuentes de agua se han visto afectadas y contaminadas por la minería. Decenas de ellos tienen metales pesados en la sangre, provocando anemia, enfermedades respiratorias y cardiovasculares, cáncer y malformaciones congénitas. La minería también ha saqueado su riqueza creando campos muertos y matando al ganado, el motor de la economía de la población local. Además, ha llevado a la pérdida del folclore y la identidad andina.
Esto, que es parte del saber adquirido por Alessandro luego de seis años de permanencia y viajes por territorios peruanos, hace parte también de un proyecto más amplio y complejo: visibilizar los daños provocados por el extractivismo minero en los Andes sudamericanos. Además del Perú, ya estuvo en Ecuador y Bolivia. Ahora empieza sus andanzas por territorios andinos de Argentina, haciendo de Catamarca el inicio de su travesía.
A partir de ahora, otras personas serán quienes revelen –desde la experiencia sufrida, vivida en carne propia- los procesos de despojo, empobrecimiento, vulneración de derechos, ruptura de tejidos sociales, sometimiento, persecución, criminalización, engaño, manipulación, muerte lentamente anunciada dejadas por la gran minería. De todo esto saben las personas que habitan estos territorios, aunque no todas lo atestiguan, sea por miedo, engaño o sumisión; tal vez, complicidad de intereses. Es necesario entonces contactar con las personas que se acuerpan en organizaciones: Comunidad de Atacameños y Atacameñas del Altiplano de Antofagasta de la Sierra; Asambleas El Algarrobo, Choya, Radio El Algarrobo, de Andalgalá, o la Asociación ACAMPA, de familias de campesinxs del Abaucán en Fiambalá.
Son las personas que se han librado de la soberbia androcéntrica – colonial – capitalista de creerse dueños- propietarios de la tierra; por el contrario, se reconocen hijas de la Madre Tierra, pertenecientes a sus entrañas fecundas, necesitadas del vínculo que genera vida y comunidad.
Son las personas que se han librado de la perversión capitalista que considera riqueza lo que es dinero, invento moderno creado para dominar; por el contrario, son personas conscientes de que la riqueza verdadera está en las fuentes de la vida, en la tierra, en el agua, en el aire, en las relaciones fraternas y amistosas.
Son las personas que se han librado del poder opresor generado por la falaz economía del mercado; por el contrario, son personas libres en su decisión de construir alternativas genuinas de reproducción de la vida con dignidad y justicia. Con ternura y con coraje; con rebeldía y creatividad; con esfuerzo y aprendizajes compartidos.
Son las personas que tratamos de ser. Muchas, incontables, diversas, militantes de las causas que sostienen
En la casa de retiros Claret, en Guatemala, tuvo lugar el V° Encuentro Continental de la Red Iglesias y Minería (RIM) entre los días 3 y 8 del corriente mes de noviembre. Bajo el lema “Tejiendo relaciones de ternura con la Madre Tierra hacia territorios libres de minería”, la RIM celebró diez años de andadura, de ser y estar involucrada en la lucha de las comunidades que resisten al extractivismo minero.
Nuestra asociación Be. Pe., integrante de la RIM desde su fundación, estuvo presente en el encuentro a través de las compañeras Patricia Agosto y Rosa Aráoz. Fueron parte de más de 80 personas de 16 países latinoamericanos, caribeños y europeos que comparten la pasión de los pueblos rebeldes, con ancestralidades indígenas y negras. La pasión generadora de vida nueva, vida posible, vida digna, que lleva más de 500 años de resistir a la violencia impuesta por la explotación minera capitalista – colonial – patriarcal.
A partir de una mirada colectiva de los contextos globales y latinoamericanos, determinados por las lógicas de la “Hidra capitalista”, el encuentro dio espacio para profundizar los diagnósticos territoriales, revisar el camino andado y definir los ejes de acción que nos permitan responder a los desafíos actuales.
Confirmamos que la fuerza que emerge del útero de las luchas territoriales, se concentra en las espiritualidades ricas y diversas: en las culturas, las visiones cósmicas, las sabidurías ancestrales de las comunidades Afro-Indias-Americanas-Caribeñas. De allí que los espacios de Encuentro se fueron entretejiendo de reflexión, de palabra, de gestos, de símbolos sagrados… de allí que el encuentro resultó una construcción colectiva y fraterna de caracolas, de arcas, de comunidades eco-céntricas dispuestas a reverdecer el florecer de nuestra Abya Yala.
En esta certeza, nos fortalecemos y profundizamos nuestro compromiso. Be. Pe. seguirá siendo parte de la RIM. Continuaremos articulando las luchas territoriales, fortaleciendo los vínculos, caminando las transiciones justas y necesarias. Permaneceremos con disposición al diálogo y al aprendizaje, con vocación de ser Comunidad junto a las comunidades de Catamarca y Santiago del Estero que nos permiten afianzar nuestra identidad y corregir los desatinos de nuestra humana condición. Nos encontramos, cada día, construyendo futuros: femeninos, ancestrales, comunitarios, posibles y necesarios.
Si pensamos en la palabra club en español y clube en portugués, nos remite a una asociación de personas con intereses comunes, y dedicada a actividades recreativas, deportivas y/o culturales. Es decir, una palabra que implica personas, intereses en común y actividades a desarrollar.
Esa palabra se ha hecho famosa durante este año porque ha sido muy utilizada en los discursos de funcionarios (principalmente varones) de las economías del Norte Global. Hagamos un breve recuento de las diferentes propuestas de constitución de clubes que hemos podido escuchar y leer en estos últimos meses.
Algunas de ellas establecen la necesidad de formar un club entre los países compradores de las llamadas “materias primas críticas”, consideradas como imprescindibles para la transición energética propuesta en y para el Norte Global.
En enero de este año, en el Foro de Davos, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, proponía la creación de un “Club de materias primas críticas” entre la UE y países afines como Estados Unidos (habla concretamente de “socios que piensen como nosotros”) “para fortalecer colectivamente las cadenas de suministros y diversificarse” para contrarrestar el casi monopolio de China en la producción de litio y tierras raras.1
En febrero también de este año, la administración Biden expresó tener la intención de crear un “club de compradores de minerales críticos” con aliados de EE.UU., como la UE y el Grupo de los 7 (Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, Reino Unido y Estados Unidos, es decir, las economías consideradas más avanzadas del mundo). Nuevamente la propuesta demuestra preocupación por China y por las grandes reservas que el gigante asiático tiene de tierras raras, así como litio y cobalto, y por la posibilidad de que Washington deje de tener acceso a esos minerales si se tensiona aún más la relación con Pekín2. Hay que aclarar que Washington ya había creado el año pasado una “Asociación de Seguridad de Minerales” de la que forman parte Canadá, Australia, Finlandia, Suecia, Francia, Alemania, Japón, Corea del Sur, el Reino Unido y la UE, con el fin de asegurar cadenas de suministros globales de materiales críticos, ayudando a catalizar la inversión de los gobiernos y el sector privado en estas consideradas oportunidades estratégicas3 (es decir, “tecnologías para la transición global a energías limpias”). Esta propuesta implica millones de dólares de inversión de los gobiernos, que claramente dejan de invertir en otras áreas.
Otras propuestas proponen formar un club entre los países vendedores de “materias primas críticas”.
En septiembre se realizó en Perú4 una convención minera llamada Perumin 36, por el número de su edición (es decir que se hace desde 1987), y allí el embajador de la UE en el país hermano, Gaspar Frontini, expresó que los 27 estados que conforman la UE proyectan establecer un “Club de países proveedores de minerales críticos” que son elementos que corren riesgo de escasez. El embajador expresó que esa propuesta le podría interesar al Perú. Podría interesarle a Perú y quizás a otros países de AL ya que sería una manera de dinamizar -dicen algunos analistas- las relaciones Europa-América Latina, que están bastante congeladas en estos últimos años. La propuesta de una profundización del colonialismo eurocentrado se suma a las propuestas de otros países del Norte Global y del gigante asiático.
También hay que tener en cuenta que, en este mismo mes de septiembre, el Parlamento Europeo votó la Ley de Materias Primas Fundamentales, cuyo propósito es garantizar el suministro de estas materias primas, financiar nuevos proyectos,
aumentar la exploración dentro y fuera de Europa para nutrir a la industria del automóvil eléctrico y defender la soberanía de la UE frente a la dependencia externa. Los principales problemas de esta ley son el profundo avance del extractivismo minero que implica garantizar el suministro y la ignorancia de los derechos de los pueblos indígenas en su contenido5.
Quien no ha necesitado hasta ahora constituir ningún tipo de club es China por su papel dominante en la cadena de suministros, en el procesamiento de minerales críticos y en la fabricación de baterías6. Más allá de que no ha creado un club, no podemos olvidar el proyecto económico chino conocido como la Franja y la Ruta, o la nueva Ruta de la Seda, propuesto hace exactamente 10 años, que implica la creación de dos grandes rutas comerciales, una marítima y otra terrestre, que implican importantes inversiones en infraestructura, además de la garantía de la importación de materias primas y la exportación de productos industriales. La iniciativa une al gigante asiático con Europa, África y AL. Casi 150 países están adheridos a la iniciativa, que incluyen países europeos, asiáticos, africanos y latinoamericanos (Algunos de ellos son: Panamá, Cuba, República Dominicana, El Salvador, Nicaragua, Costa Rica, Uruguay, Ecuador, Venezuela, Chile, Bolivia, Perú y la Argentina).
Según Golman Sachs, uno de los grupos de banca de inversión y de valores más grande del mundo, China tiene una posición dominante en cuanto a minerales críticos, ya que “refina el 68% del cobalto del mundo, el 65% del níquel y el 60% del litio del grado necesario para las baterías de los vehículos eléctricos”, a la vez que fabrica el 65% de los componentes de las baterías, el 71% de las celdas de las baterías y el 57% de los vehículos eléctricos del mundo7.
Si retomamos la definición del término club de la que hablábamos al principio, encontramos que estas propuestas de clubes son asociaciones de países con intereses en común: apropiarse de minerales críticos compitiendo ferozmente entre sí, pero que no se dedican para nada a actividades recreativas, deportivas o culturales; más bien su existencia implica actividades depredadoras que destruyen modos de vida y culturas que ocupan ancestralmente los territorios de los que pretenden apropiarse.
Ahora bien, de un lado de estos clubes están las economías centrales que quieren garantizar minerales estratégicos para la transición energética que proponen, aliándose en clubes de países compradores para intentar aventajar a China, o proponiendo clubes entre países proveedores para que no les vendan a China y no sigan alimentando su papel dominante.
Del otro lado de estos clubes, están los países del Sur Global con capacidad de proveer esos minerales. No nos es difícil sospechar que a la mayoría de los países latinoamericanos les parecerá interesante -como sugiere el embajador de la UE al Perú- formar parte de estos clubes, si esa pertenencia les garantiza divisas que engorden un poco las flaquísimas economías nacionales.
De ninguno de los dos lados, sino debajo de estos cálculos, están las comunidades y pueblos que viven en los territorios donde se encuentran esos minerales críticos. Y como se trata de clubes de los de arriba, los territorios de NuestrAmérica, y del Sur Global en general, se ven sometidos a una profundización de su lugar de trofeos, tal como los que se ganan en un club cuando hay una competencia. Por eso es importante seguir hablando de colonialismo y colonialidad, como una continuum de la historia de saqueo y violencia del Sur Global desde la constitución del capitalismo colonial, extractivista y patriarcal. Un interesante desafío sería constituir un club de los pueblos y de la Madre Tierra cuyo objetivo central sea garantizar la reproducción de la vida asumiendo la ecodependencia y la interdependencia de nuestra especie.